Lujos de papel y cartón

Comienza a llegar la cuesta de septiembre, la llamada "Vuelta al cole". Tan bonita que la ponen en los anuncios -sobre todo en El Corte Ingles-, cuando en realidad es, junto con la cuesta de enero, el peor momento económico para una familia de clase media-baja con hijos.

¿Cómo puede ser que en la coyuntura económica en la que estamos actualmente, con más de 5 millones de parados, cierres de empresas, desahucios, etc... la gran mayoría de los colegios españoles, junto con las editoriales, cambien los libros de un año para otro, o en el "mejor" de los casos, cada dos años?

Estoy estudiando para ser maestro de Primaria, y puedo asegurar que el cambiar los libros es una auténtica GILIPOLLEZ. Lo digo alto y claro. Se dan prácticamente los mismos contenidos, los mismos ejercicios, etc y todo esto, ¿para qué? No me entra en la cabeza, lo tengo que decir, que cada familia tenga que hacer un gasto extra de media cada año de más de 150 euros por niño o niña (además de libretas, reglas, bolígrafos, folios, etc). ¿Pero estamos locos o qué pasa?

Creo que es el momento de, al menos mientras pasa esta situación, se pase a la filosofía del reciclaje de libros, que pasen de unas manos a otras, y no nos "obliguen" a gastarnos ese dineral en libros, que como ahora ocurre, de un año a otro solo nos van a servir para prender fuego las hogueras.